Vamos a injertar en un olivo
Este año, 2014 hemos realizado la recolección de las aceitunas,… estaba cargado más o menos sobre unos 60 Kg de aceituna,
También hemos machacado lo de 3 garrafas de 10 litros,… y la primera ya ha caído (rícas-rícas)… las otras siguen «cogiendo sabor».
(Bueno para conseguir estas aceitunas manzanilla, …veamos el Seguimiento desde el 2009)
Esta es la secuencia del injerto que realizamos en un olivo.
Mi vecino Diego que es un artista es el que me anima en todas estas aventuras, yo solamente ayudo y aprendo, sabe un montón de cosas, se guía por la luna, sigue unas pautas, es un artista, está jubilado y como yo le digo » -Diego Ud. tiene todo el tiempo del mundo, yo vengo a descansar después del trabajo, pero ya me vengaré cuando me jubile y le haré la competencia «.
A este olivo le tengo mucho cariño y me ha dado mucha sombra, entre una rama y un poste que tengo a modo de tendedero, engancho una hamaca de cuerdas. Si pudiera quejarse seguro que a mí me no me tendría en gran estima, pues han sido muchas las siestas que me he echado debajo de él y nunca se ha quejado soportando mi peso (gracias).
Las aceitunas que ha dado no son muy grandes por eso Diego me convenció para que le talará 3 de las cuatro ramas, (la de enganche y sombra ¡ni tocarla!). Una vez taladas se trajo de un olivo suyo (de manzanilla) unas ramitas, las fue cortando dejándola entre diez o quince centímetros. Luego por la parte más gruesa las hizo forma de cuña. Con un palo seco a modo de cuña abrió un poco la corteza del tronco y allí metió las espitas una a una, hasta cuatro por corona. Una vez insertadas yo cogí un poco de tierra, la humedecí y fui tapando todo el corte del tronco. De un saco de patatas de cuerda corte unos trozos rectangulares y empezamos a ponerle una especie de venda a todo alrededor. Lo aprisionamos con cuerda bien prieto y así en los tres muñones. He seguido el proceso y los primeros días humedecían la tierra para que los injertos se mantuvieran frescos, así durante varias semanas.
El tiempo fue pasando y el resultado el que se ve. Como le digo algunas veces a Diego «- Tiene Ud. unas manos… es un artista de los injertos.
Anécdota. Un día al igual que con el injerto de olivo decidimos injertar en un Kaqui y convertirlo en Kaquis Cheroni (creo que se dice así) son como tomates y se comen mucho mejor, pero teníamos un problema. Él había sufrido un corte bastante profundo en la mano izda. y yo coincidencia que tenía un problema en el codo derecho (una epicondilitis), pues entre los dos uno con una mano y otro con la otra hicimos los injertos, en este caso abriendo la rama en «v» y ahí metimos una cuña del Cheroni, luego lo vendamos con cinta de plástico y el resultado impresionante prendieron todos. Por eso siempre comentamos que este árbol necesitó de dos «mancos» para poder realizar los injertos.
Diego dice que es posible que para el próximo año ya se vea alguna aceituna.
Por cierto, Diego me ha aconsejado que corte la última rama que quedaba para que la savia le diera más fuerza a los injertos, y yo en esto no le llevo la contraria y obedezco. Me he quedado sin sombra, (ya veremos este verano), tendré que ponerme un parasol.
En otro olivo que injertamos hicimos tres técnicas de injerto:
de púa, de yema y yo hice uno el de casquillo ( uno que un amigo mío hace en almendros y que le da muy buen resultado). Total que los de púa son los triunfadores, los de yema quedaron muy bien pero el de casquillo como los otros creció demasiado apagaron la luz impidiéndole su crecimiento
Espero que sirva de ayuda
Un saludo
Un vídeo posterior.